Existen dos formas superlativas del adjetivo áspero: aspérrimo y asperísimo.

La forma aspérrimo es considerada la forma culta del superlativo. Este es un adjetivo superlativo irregular porque se forma a partir de la raíz latina asper. Además utiliza el sufijo -érrimo, típico de muchos de los adjetivos basados en un raíz latina terminada en -er.
Aparte de la forma irregular aspérrimo también se acepta la forma regular asperísimo, aunque es poco utilizada. Esta es una forma regular porque solo requiere la adición del sufijo -ísimo.
Las dos formas son adjetivos superlativos absolutos porque indican un grado máximo de una determinada característica, en este caso definida por el adjetivo áspero.
También es posible indicar un grado máximo de intensidad mediante adjetivos superlativos relativos. Estos adjetivos se forman mediante una relación de comparación y indican una superioridad o inferioridad dentro de un grupo. Por ejemplo,
Su tercer álbum pueden encontrarse las canciones más ásperas de su carrera.
En este caso, el grado de aspereza se aplica sólo a las canciones de un artista.